La exposición ‘Identidades’ se puede ver hasta finales de mes en el Centro de Usos Múltiples de El Parador.

El Centro de Usos Múltiples de El Parador acoge hasta finales del mes de junio la exposición colectiva de los alumnos del Ciclo Superior de Fotografía de la Escuela de Arte de Almería. La muestra se denomina Identidades’

El proyecto ‘Identidades’ surge como actividad de clase, de este ejercicio individual, a partir de las unidades didácticas de la asignatura “Proyectos de Fotografía 2” que investigan distintos ámbitos de la fotografía, en este caso el Retrato y sus subgéneros.

Tras presentarse la posibilidad de exponer en el Centro de Usos Múltiples de El Parador en Roquetas de Mar, se planteó un formato expositivo que reflexionara acerca de las identidades, cómo nos vemos nosotros, cómo nos ven los demás, un ejercicio esencial para educar la mirada de un fotógrafo.

La propuesta de la profesora Elena Pedrosa parte del concepto de retrato psicológico. Después de haber observado el trabajo, estética, concepto y metodología de autores clásicos o de referencia y actuales, como contenido transversal de la materia, propuso la comunicación emocional, la empatía hacia el otro, y el desarrollo de un punto de vista de observador con respecto a la otredad que sirve al alumno para crecer como fotógrafo y como persona.

En la exposición participan Alejandra García, Leonor García, Fran Gómez, Patricia Gómez, Mary Lao, Chema López, María del Mar López y Sara Martínez. Tras realizar cada uno un autorretrato se llevó a cabo la segunda parte del ejercicio en coordinación con la asignatura “Técnica Fotográfica 2”, que imparte Antonio Jesús García `Che´.

Utilizando la cámara de Gran Formato, se expuso un negativo de papel que luego se escanearía para obtener como resultado las imágenes digitales, que trabajaron con Gestión de Color en Blanco y Negro según los contenidos de otra de las Unidades Didácticas de la asignatura “Proyectos de Fotografía 2” que imparte Elena Pedrosa.

Primero se realizó un ejercicio de observación en el patio, en un lugar neutro y lo más natural posible, con capacidad de movimiento y relación para observar y seguir al otro a modo de espejo. Se trataba de aprender a moverse como el compañero, seguirlo con la mirada, imitarle, poner atención “de verdad” en él, no dejar de contactar con la mirada.

Luego cada uno pensó en las características de ese compañero elegido, las interiorizó, empatizando con él y observando su  “yo” para fotografiarlo en el estudio con esquema de retrato clásico.

Pasando por la fase de selección de obra, ideamos la manera de disponer las fotos, incluyendo un texto a modo de reflexión conceptual acerca de la identidad,  inspirándonos en la puesta en escena de la exposición “Los ciegos” de la artista conceptual Sophie Calle.