Lleno en el Teatro Auditorio de Roquetas para disfrutar de esta ópera donde participaron profesores y alumnos de la Escuela de Música, Danza y Teatro

Tras casi un año de ensayos, había muchas ganas de disfrutar de la ópera ‘Dido y Eneas’ proyecto surgido en el seno de la Escuela de Música, Danza y Teatro de Roquetas de Mar. El viernes fue el día elegido para el estreno de esta ópera, donde participaron un centenar de personas, entre cantantes, instrumentistas, actores y bailarines, que unieron sus fuerzas en el mismo escenario para hacer renacer una historia que si bien se gesta en Inglaterra hace más de trescientos años, remonta al espectador aún a tiempos más lejanos: la Antigüedad Clásica.

Tras el estreno, se podía ver un ambiente de alegría y satisfacción. La propia concejala de Cultura, María Dolores Ortega, que no quiso perderse este gran acontecimiento, mostraba su alegría y dejaba constancia de la importancia que tiene la Escuela de Música, Danza y Teatro en Roquetas de Mar, ya que todos los participantes son profesores o alumnos del centro.

El sueño se veía cumplido con creces. Fueron varios minutos de aplausos al final de la ópera. El reto era realidad, ya que durante meses niños, adultos, alumnos y profesores, habían dejado lo mejor de ellos en cada ensayo, en cada charla y en todos esos momentos mágicos que sólo la ópera proporciona. La música de Henry Purcell, durante siglos interpretada, se ha ido consolidando con el tiempo como una joya del Barroco universal y sin lugar a duda, una de las más representadas y apreciadas en el mundo.

Curiosamente, se tiene constancia de que esta ópera fue estrenada precisamente en una Escuela, la Escuela para niñas de Josias Priest; en Chelsea, Londres (1688). Su música, refleja la influencia que tuvo Purcell de las corrientes estilísticas de la Europa de su tiempo, pudiéndose apreciar rasgos propios del Barroco francés pero sin perder la tradición melódica inglesa de carácter sencillo y más popular.

Cabe resaltar la enorme teatralidad de la música, muy al servicio de la historia, lo cual ayudó enormemente a entender la trama no sólo con la vista, sino también con los oídos y el corazón. Todo ello unido a la facilidad para introducir coros, números de danza o intervenciones teatrales, hacían de ‘Dido y Eneas’, una ópera atractiva, dinámica y muy fácil de disfrutar.

El viernes se puedo disfrutar de una  versión de la genial obra de Purcell, respetando la esencia de la ópera, pero adaptándola también para enriquecerla. “Nuestra visión del mundo fantástico de Purcell, se ha plasmado en cada nota, palabra y movimiento. Esta experiencia se ha convertido en un regalo, todo un privilegio”, sostiene Alejandro Torrente.

‘Dido y Eneas’ es una ópera en tres actos con música de Henry Purcell que relata la historia de amor entre Dido, reina de Cartago y el héroe troyano Eneas, y su desesperación cuando la abandona. Una obra monumental en la ópera barroca, se recuerda como una de las más destacadas obras teatrales de Purcell.

La dirección de la ópera corrió a cargo de Alejandro Torrente que contó con Ángel Manuel Pérez, Francisco Javier Calderón y Encarna Martínez como asistentes de producción. Los personajes de la opera fueron Desireé Manzano (Dido, Reina de Cartago), José Luis Herrador (Eneas, Príncipe troyano). Ambos estuvieron magistrales en sus interpretaciones.

Le acompañaron en el escenario María Cruz Calvo (Belinda, Dama de la reina), Maite Ordaz (Dama de la corte), Marisol Ruiz (Hechicera), María José Cuadra (Bruja), María José Pérez (Bruja), Luis Ariza (Marinero) y María Roa (Destino).

El Coro estuvo formado por las sopranos: Ana Márquez, María José Pérez, Pascalina Gopou, Mercedes Pomares, Gracia Castro, Mercedes Pina, Alicia Baños, M. José Cuadra, María del Mar Urbieta, Marisol Ruiz, Pepi García. Los contraltos fueron  M. Carmen Fernández, M. Carmen San Martín, Isabel Sánchez, Debra Scott, Libia Kowarik, María Salinas.

Los tenores fueron Francisco Javier Porras, Ramón Aguilar, Manuel Márquez y Miguel Ángel Milán. Como Bajos estarán Pedro José Frutos, Iluminado Caparros, Enrique J. Godoy, Wenceslao Guerrero y Carlos Giménez

También en el cuerpo de Danza participaron Irene Márquez, Ana Cruz, Juan Miguel Contreras, Victoria Hernández, Alba Lara, Sonia Anguita, Sabina Richards y Ana Guerrero. La dirección de Danza y coreografía corre a cargo de Carmen Rubí.

La Orquesta la componían Marta Sánchez, Marta Fernández, María Carmen Manzano, Javier Orero, Antonio Von Papp, Lucía Verdegay, Alba Linares, María Asensio, Alba Ortega, María del Mar Ibáñez, Sarah Orero, María del Castillo, Reyes Álvarez-Ossorio, Antonio Lao, Elena Caparros, Adrián Maldonado, Mariam Boussouf, Álvaro Jiménez, Paula Santiago, Sandra Valero, Cristina Sauces, Javier Alonso, Celia Vargas, Sergio Galindo, Pilar García, Lucía Navarro, Martina Vázquez (violines).

José Vicente Ibáñez, Elena Torres, Patricia Benedito, María Carmen Torres, Andrea del Rosal, Laura Molina (violas); Eva Maldonado, Jesús Domínguez, Diego Cánovas, Sonia Baleriola (cellos); Ilay Kessel y Ana Belén García (contrabajos); Mercedes Sáez (Traverso), David Torrecillas y Jesús Marfil (bajo continuo).