Fantástica la actuación de la bailaora gaditana y el cuerpo de baile de su compañía en el Teatro Auditorio 

Sara Baras nació para bailar. Cuando la bailaora gaditana se sube a un escenario y se pone a zapatear surge el arte con mayúsculas. De esta manera, el pasado sábado en el Teatro Auditorio de Roquetas de Mar, Baras llegaba con su espectáculo ‘Sombras’ que no dejó indiferente a nadie tras dos horas de intenso espectáculo.

Además, Sara Baras se ha rodeado de un cuerpo de baile que son grandes profesionales y un cuadro de artistas flamencos que se ganan al público con su poderío sobre el escenario. Con tanto arte sobre las tablas, el éxito a priori estaba asegurado. Todo fue emoción desde el principio al final.

El poderío de Sara Baras se deja entrever desde ‘Sombras’, lo primero que baila la artista, en un escenario con una luz tenue, pero que vislumbra muchas sombras por cada rincón. Ella se apodera del escenario con ese taconeo y ese contorneo que solo ella sabe hacer. Esos movimientos solo los logra Sara Baras.

La bailaora destila arte hasta cuando se queda quieta, alza un brazo y disfruta del cante. Las luces son claves en el espectaclo ‘Sombras’. Es un elemento clave en el inicio del espectáculo, que cada vez va a más. Baras se entrega en cada baile, conecta, suda, e incluso suelta alguna sonrisa al público. Son los momentos es que el público no duda en aplaudir el arte.

Insuperable la artista cuando hizo ‘La Farruca’. En este baile, el público no parpadeaba disfrutando de la belleza sublime del arte que tiene Baras.  En ‘La Serrana’, vuelve Sara Baras a deleitar con sus movimientos. Se aprecia que ella disfruta tanto como las personas que la observan desde el patio de butacas.

Otro gran momento de la noche lo interpreta Sara Baras con José Serrano. Se trata del Vals, donde se arroja poderío y lo sublime de la belleza en un baile que impresiona en  manos de estos dos grandes profesionales. El cuerpo de baile en ‘Zapateado’ también está simplemente sensacional, dejando constancia de hay muchas horas de trabajo para obtener un resultado tan vistoso.

Luego el cuerpo de baile ejecuta con maestría ‘Mariana’ y ‘Sombras’ para darle paso a José Serrano que baila de forma magistral unos tangos.  Sara Baras luego sale para hacer ‘Alegría’  y junto a Serrano también ejecutar ‘Bulería’. También participa el cuerpo de baile.

El final del espectáculo es apoteósico con el fin de fiesta con Sara Baras y toda la compañía en el escenario. Son diez minutos que se antoja poco tiempo porque son sublimes en su ejecución.  Es la alegría de la noche. Es un final fantástico de una artista que lleva 20 años sobre las tablas y que cada vez baila mejor.