Estuvo acompañada por la concejala de Cultura, María Dolores Ortega y el director del área de Cultura, Manuel Cruz.
La escritora Pilar Quirosa presentó recientemente en el Castillo de Santa Ana en Roquetas de Mar su libro ‘Memorial Shadow’ editado por Editorial Nazarí de Granada. Intervinieron junto a la autora; María Dolores Ortega Joya, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Roquetas de Mar y Manuel Cruz, director de Cultura del Ayuntamiento de Roquetas de Mar.
La obra cuenta con un prólogo de José Cabrera Martos, doctor en Filología Hispánica. Universidad de Granada. Se trata de una catarsis existencial. Un recorrido por los mundos que encauzan la palabra y el silencio en el encuentro con la vida. Un homenaje al arte, la filosofía y la literatura.
El libro se compone de tres partes. La primera ‘Memorial de Luz’, precedida por una cita de Paul Verlaine. La segunda parte ‘Memorial de Sombras’ está precedida por una cita de Sylvia Plath y la tercera parte ‘Memorial Destino’ está precedidita por una cita de Alejandra Pizarnick. La foto de portada es de Rodolfo Criado, el presidente del gremio de libreros actual. El libro fue presentado en Almería y en Granada en noviembre de 2016.
Manuel Cruz, director del área de Cultura del Ayuntamiento de Roquetas hizo una extraordinaria introducción a la obra de Quirosa, señalando que “Memorial Shadow es ante todo, una honda y bellísima meditación sobre el tiempo, sustancia de la vida”. También elogió el texto de Quirosa, subrayando que “se trata de una escritura envolvente y pluridimensional que se estructura en forma de espiral, donde todos los registros de la existencia confluyen en un centro donde no está solo Pilar, donde estamos todos”.
“Esta narrativa, aparentemente desestructurada, tiene la virtud de situar a cada uno de los lectores en el centro abismal desde donde se despliega este enorme canto a la vida, a su luz, a sus sombras y, por encima de ellas, al enigmático silencio azul que nos contiene como sustancia última y primera, como escenario esencial por donde siempre transitamos mientras vivimos y quién sabe si más allá”, dijo Cruz.
También hizo referencia a la infinidad de referencias que aparecen en el libro. “Desde mi punto de vista las referencias que se intersectan cadenciosamente en múltiples pasajes del texto no constituyen un simple recurso literario ni un adorno. Contribuyen a invocar un conjuro, hecho de palabras, memoria y vida, que consigue neutralizar la mayor amenaza interior en tiempos de pesadumbre: el aislamiento, la soledad, el amargo silencio, la terrible sensación de estar lejos, apartado de todo y de todo… de la vida”.
Quirosa señaló que “en ocasiones, es necesaria una profunda catarsis para enfrentarse a un destino. Donde, sin duda, el vuelo en círculos marca un camino pero donde es necesario saltar la barrera del tiempo. Sucede así cuando, campo a través, no se divisa el futuro, porque no existe y el hoy se convierte en un presente continuo, donde no puede ni se debe bajar la guardia y hay que hacer buen uso de la ironía y otras formas de recursos, ante la presencia del frio roce de los icebergs anímicos que potencian el camino”.
La escritora subrayó que “el yo narrativo ha de volar por necesidad. No se puede salir indemne de muchas de las escenas que atraviesan el sendero de claroscuros, Memorial Shadow, no exentos de esperanza. Porque también es Memorial de Luz y Memorial Destino, futuro en el tiempo, donde se cuela el azar. Y no se contempla otra ecuación, más que la aceptación de lo vivido”.