El alcalde ha revisado esta semana los trabajos que se están realizando en Aguadulce, que también han sido visitados por el colegio de ingenieros técnicos agrícolas

La Concejalía de Medio Ambiente que dirige la edil Francisca Toresano está aplicando en las últimas semanas un nuevo protocolo de poda de arbolado en el municipio con el objetivo de regenerar la planta y prevenir los daños y la aparición de plagas, además de ahorro en el mano de obra y en la aplicación de fitosanitarios. Unos trabajos que han sido revisados por el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, quien acudió junto a la técnico Mar Verdejo y los especialistas de la empresa Eulen, adjudicataria del servicio, a las calles de Aguadulce, donde se están aplicando las nuevas metodologías.

«En los últimos meses, estamos llevando a cabo importantes actuaciones encaminadas a mejorar los jardines del municipio, con nuevos métodos y también con el refuerzo de trabajadores que se ha acometido con la entrada de 30 jardineros del plan de empleo, así como la licitación de los servicios de poda. Todo ello hará que dispongamos pronto de unas zonas verdes adecuadas», afirma el alcalde, quien añade que «aunque en ocasiones no es fácil y hay que superar los obstáculos normativos que nos impiden hacer ciertas actuaciones, el trabajo que realizamos día a día para mejorar la calidad y los servicios para nuestros ciudadanos dan sus frutos».

En base a los informes de la concejalía de Ciudad Saludable, los técnicos de jardinería trabajan cada uno de los árboles de forma personalizada, haciendo un primer examen sobre los posibles daños existentes en el mismo para definir sus necesidades. En este sentido, el área incide en el estudio del uso y amplitud del espacio disponible y en la selección de la especie adecuada en base a su morfología con el fin de permitir el desarrollo libre del ejemplar, minimizando las intervenciones de la poda.

Destaca por ello el cambio en el corte de la poda de ficus, mayoritario en el arbolado viario. La nueva metodología busca proteger las ramas de una excesiva exposición solar con el recorte del contorno y un desbroce controlado de la copa que favorezca su crecimiento hacia arriba y no hacia los lados. De esta forma, se logra regenerar los posibles daños que presente y se le otorga mayor vigor para la prevención de la aparición de plagas. Tal como indica el informe, la limpieza de este tipo de árbol puede realizarse en cualquier periodo del año sin interferir en su desarrollo normal.

El Colegio de Ingenieros Técnicos Agrícolas ha mostrado su interés por conocer los trabajos que se están desarrollando en Aguadulce. Esta misma semana, la presidenta del COITIAL, Teresa García, ha visitado los trabajos junto a los técnicos municipales.

De forma paralela, la Concejalía está trabajando en la aprobación de nuevas ordenanzas en la que abordan técnicas sobre la erradicación de la plaga procesionaria y del picudo rojo. Respecto a la procesionaria, se recomienda que se favorezca la presencia de predadores y parásitos naturales en los pinares, tal y como también está llevando a cabo la propia Concejalía.

En cuanto a la extinción del escarabajo picudo rojo, desde el pasado mes de diciembre, la Concejalía de Medio Ambiente desarrolla un completo estudio de posibles palmeras con picudo y su tratamiento en función de la gravedad de su estado; si bien, el área incide en la necesidad de que, para lograr erradicar tanto el picudo como la procesionaria, los vecinos que dispongan de jardines sigan las indicaciones que se están dando desde el Ayuntamiento.