El concejal de Recursos Humanos y Empleo del Ayuntamiento de Roquetas de Mar, José Juan Rodríguez, ha inaugurado esta mañana el curso que durante toda esta semana permitirá a 42 agentes de la Policía Local de Roquetas adquirir el certificado de Policía Especialista en Drogas. Un curso impartido a través de la Escuela de Seguridad Pública de Andalucía (EPSA) que ofrece “una formación especializada sobre alcohol y drogas en materia de tráfico y seguridad vial así como cualifica a los agentes para la realización de las pruebas de detección de drogas tóxicas, estupefacientes, psicotrópicos u otras sustancias así como los signos asociados a su consumo”, tal como ha revelado el concejal.

José Juan Rodríguez ha querido “agradecer a la Dirección Provincial de Tráfico de Almería y, muy especialmente, a la ESPA y su responsable de formación, Emilio Andrades, por la confianza puesta en este Ayuntamiento para la organización y certificación del curso”.

El edil ha destacado en este sentido “el trabajo que realiza el Ayuntamiento de Roquetas para dotar a todos los empleados municipales de las herramientas necesarias para el ejercicio de su labor en las condiciones óptimas, entre las que se encuentra, cómo no, una adecuada formación, lo más especializada y actualizada posible”.

Un objetivo en el que se enmarca este curso en el que se ahondarán en aspectos jurídicos, científicos y prácticos “y en el que la parte práctica cuenta con gran relevancia”. De esta forma, continúa José Juan Rodríguez, “se facilita a los agentes de los conocimientos y procedimientos correctos de actuación policial en la realización de los controles de las sustancias y en los ilícitos que se puedan plantear”.

Una formación “que asegura la mayor profesionalidad para los agentes de la Policía Local lo que redundará en el objetivo fundamental: reducir los accidentes en la vía pública, con especial énfasis en la detección del fenómeno del policonsumo -consumo de sustancias combinadas-“, explica el concejal.

Y es que, tal como informa la DGT y se subraya en el curso de formación, “el consumo de drogass no es solo intrínsecamente poco recomendable para la conducción, sino que está muy altamente correlacionada con otros comportamientos de riesgo, como la velocidad inadecuada o la falta de uso de sistemas de retención. La combinación alcohol o drogas, la distracción y la velocidad inadecuada se encuentra tras muchos de los siniestros en vías convencionales que acaban en muerte”.