Se ha realizado una visita técnica para monitorear las poblaciones de estos insectos
El Ayuntamiento de Roquetas de Mar, a través del área de Medio Ambiente, continúa con los trabajos para acabar con los mosquitos y sus larvas en el municipio. Este lunes, la concejal en funciones, Susi Ibáñez; el técnico responsable de espacios naturales protegidos de la Delegación, José Manuel López; técnicos de Athisa y miembros de Serbal han cursado una visita técnica de monitoreo de las poblaciones de estos insectos en la Ribera de La Algaida con el objetivo de comprobar in situ cómo está la situación en esta zona natural. En esta zona la fumigación se realiza de manera continua pero selectiva, porque la presencia de aves protegidas y sus huevos -muchos hacen las puestas en el suelo- es imprescindible no solo por la importancia medioambiental que tiene sino también porque, como insectívoras que son, ayudan a controlar la presencia de mosquitos. De hecho, según ha podido constatarse, este modo de proceder con la fumigación selectiva ha incrementado las presencia de pájaros en la Ribera de La Algaida.
Según ha explicado Susi Ibáñez, la presencia de Serbal ha sido imprescindible para poder adentrarse en La Ribera, “porque es época de nidificación y hay que llegar hasta las charcas para tratarlas contra los mosquitos y sus larvas sin riesgo para los nidos”. Emilio González, de Serbal, ha hecho hincapié en que hay especies que ponen sus huevos en el suelo y en que hay que tener especial cuidado con ellos hasta llegar a las zonas más húmedas para tratarlas. Por su parte, la técnico de Athisa, Marta Guntiñas, ha explicado que “el retraso de las lluvias combinado con las altas temperaturas ha elevado la temperatura del agua de los humedales y eso favorece el desarrollo rápido de larvas de mosquito, a lo que se suma que las piscinas particulares han empezado a funcionar muy tarde y, sin tratar, propician la proliferación de larvas, que son las que llegan fundamentalmente a las zonas vecinales”. “Queremos conseguir llegar con larvicidas al mayor número de zonas posibles respetando a la fauna presente optimizando los tratamientos en espacios naturales protegidos”, ha dicho.
Un espacio natural
Hasta el momento se han inventariado allí 113 especies de aves distintas, y seguramente son varias las que quedan aún por sumar. Esta gran diversidad se explica por ser este un humedal muy diverso, en el que concurren varios hábitats de interés, entre los que se incluyen saladares, matorrales halonitrófilos y carrizales. Pero sobre todo se trata de un humedal situado en un lugar estratégico, en pleno litoral, por lo que es utilizado por muchas aves para pasar el invierno y como punto de avituallamiento durante las migraciones que realizan entre África y la Península Ibérica.