La concejal Francisca Toresano ha llegado a un acuerdo de colaboración con la cooperativa Koopera con el objetivo de «apoyar a la solidaridad, generar empleo y cuidar el medio ambiente».

El Ayuntamiento de Roquetas de Mar ha llegado a un acuerdo de colaboración con Cáritas Diocesana de Almería por el que se instalarán en el municipio cerca de una veintena de contenedores para el reciclaje de ropa, calzado y complementos. El Área de Ciudad Saludable que dirige Francisca Toresano muestra su satisfacción el apoyo municipal a esta iniciativa «que cumple un triple objetivo solidario, generador de empleo y del cuidado del medio ambiente».

En concreto, la red de contenedores para textil de Cáritas Diocesana es gestionada a través de la cooperativa social Koopera, que se ocupa del mantenimiento de los contenedores y de la recogida de la ropa para su reciclaje posterior. «La propia gestión de los contenedores ya supone una importante fuente de empleo, que se multiplica al conocer el destino de las donaciones de los vecinos«, explica Toresano.

Y es que la ropa, calzado y complementos recogidos son transportados a una planta donde se desinfecta, recicla y prepara para un segundo uso. Desde allí se lleva a las distintas Cáritas parroquiales para su reparto e incluso se destina a las tiendas de segunda mano Koopera, cuyos beneficios son destinados a seguir ampliando esta red. La iniciativa envía también parte de esos beneficios y donaciones de ropa a proyectos de cooperación internacional de Cáritas.

«Se trata de una cadena de trabajo diseñada para atender a personas en riesgo de exclusión social, con la creación de casi 500 personas en toda España que en unas semanas llegará al municipio de Roquetas de Mar«, subraya la concejal.

Los contenedores se situarán en todos los barrios, desde Aguadulce a El Solanillo con el objetivo de facilitar a los roqueteros su colaboración en esta labor. «En unos días haremos públicos los puntos exactos para que, a partir de ahora, sea más fácil dar una nueva vida a toda la ropa usada de los vecinos«, mantiene.

Además, la Concejalía ha supervisado que el propio diseño de los contenedores impida el uso ilícito de las donaciones, «ya que sólo puede ser retirada por los miembros de la cooperativa», por lo que la red «cuenta con todas las garantías de que cada una de las prendas entregadas llegan a su destino».