El alcalde Gabriel Amat inauguró ayer la fiesta de convivencia organizada por la Asociación de Vecinos Urba-Roquemar, a la que asistieron miles de personas a lo largo de toda la jornada y donde pudieron adquirir un sinfín de productos en las 45 casetas que fueron instaladas.
Amat estuvo acompañado por la presidente de la asociación Ximena Wooche y por miembros de la corporación municipal, haciendo un recorrido por todas las casetas e interesándose por los productos expuestos.
El alcalde destacó el éxito de la fiesta y animó a la directiva de la asociación a seguir con iniciativas de este tipo “porque favorecen a pequeños comerciantes y estimulan las relaciones entre vecinos”.
La fiesta contó con la participación de grupos de animación tanto para personas mayores como de niños y se elaboraron migas para cerca de dos mil personas.