La muestra estará abierta al público hasta finales de año

Varias salas del Castillo de Santa Ana acogen hasta finales de año una interesante y curiosa exposición de juguetes antiguos. La inauguración que estuvo presidida por Eloisa Cabrera, primer teniente de alcalde de Roquetas de Mar y María Dolores Ortega tuvo lugar el pasado jueves. Jesús Martínez es un amante de los trenes y una parte de los juguetes de la exposición son suyos. A sus 70 años conserva muchos de los juguetes que le ‘echaban los reyes’ cuando era un niño.

En esta curiosa exposición, Jesús Martínez aporta el Teatro de los niños, que se lo regalaron con siete años y que lo lanzó la editorial Seix Barral de Barcelona. “Aparte de publicaciones infantiles esta editorial hacía juguetes educativos. Lo he guardado desde hace muchísimos años”. También se puede ver un tren de lata que también tiene más de 50 años.  Antonia María Lafuente, directora del Castillo de Santa Ana fue explicando el contenido de la exposición al público presente.

Otra de las piezas históricas de la muestra es el Cine Super Nic, creado en 1931 en España, basado en los principios de la linterna mágica, y por su originalidad y especiales características alcanzó una difusión sin precedentes entre los niños de varias generaciones.

El funcionamiento era simple e ingenioso: una cinta de papel que tenía dos imágenes ligeramente distintas, arriba y abajo de la misma, era proyectada de modo que un obturador alternaba la visión de una y otra imagen y al mismo tiempo la película pasaba lentamente frente al objetivo, enrollándose a un lado y desenrollándose del otro.

En la exposición hay una pequeña muestra de juegos de mesa, entre ellos los juegos reunidos y juegos de magia. Los Juegos Reunidos eran un conjunto de juegos de mesa como el parchís, la oca, las damas, el ajedrez, y otros clásicos.  Comercializados por Geyper, empresa valenciana fundada en 1945. Los juegos reunidos de Geyper, salieron al mercado en los años 50.  Ofertando desde su creación diferentes tipos de cajas para que estuvieran al alcance de cualquier bolsillo.

La empresa de juegos y juguetes de la familia Borrás fue fundada en 1894 en Mataró (Cataluña). La empresa ganó cierta notoriedad por un higrómetro que consistía en un fraile de cartón que pronosticaba el tiempo.  Enric Borràs, lanzó en 1933 el que iba a ser su producto más famoso. Se trataba de juegos de magia, una caja con elementos para hacer trucos de magia, que con el paso de los años el hijo mayor de Enric, Manuel Borrás, asoció al nombre familiar, popularizando la hoy conocida marca Magia Borrás.

El aerogiro infantil causó sensación a mediados del siglo XX y ha llegado a la exposición de la mano de Mariana Silvente y Remedios Lafuente. Esta familia ha aportado un importante número de juguetes a la exposición. Hay muchas personas que han donado juguetes para la exposición como es el caso de Gabriel Cara, Gádor Flores, Roque García, María del Mar de la Muela, Joaquina Díaz, Natividad Labrador, Familia Mallol Goytre, María Mateu, Maruja Molina, Artemio Olivares, Mariquina Ramos, Ana María Romero Yebra, Familia Sánchez Floro, María Sol Sánchez y Francisca Ramírez.

Otra de las salas acoge una interesante muestra de muñecas de distintas etapas y modelos. Resulta impresionante poder comprobar el estado de conservación de estas piezas que hoy ya forman parte de la historia. Hay una aparece muñeca Mariquita Pérez que ha aportado Nieves, así como varias muñecas de porcelana.