El texto tiene por objeto la salida a licitación del contrato para la prestación de servicios de conservación y mantenimiento en zonas verdes urbanas durante los próximos cuatro años y una inversión anual de 6.795.270,39 euros
Este lunes 18 de enero se debate en Comisión informativa el pliego para la Conservación de los espacios verdes y arbolado urbano del municipio. Dicho documento establece las condiciones exigibles para la prestación del servicio en zonas verdes, contemplando también las normas y procedimientos de carácter técnico y administrativo relativos, tanto al servicio como a la participación en el futuro proceso de licitación.
“Se trata del primer paso para que podamos sacar a licitación este importante servicio. El crecimiento que ha experimentado la ciudad en los últimos años y que ha ido acompañado de un aumento de jardines y espacios verdes, precisa que contemos con un contrato como éste para la conservación de todos ellos”, ha subrayado el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, quien ha recordado que “en los últimos años el Ayuntamiento ha necesitado reforzar el servicio de jardinería en varias ocasiones, a causa de la limitación que tiene la administración en la contratación de personal municipal y a través de planes de empleo o de la contratación de servicios específicos como la poda o el tratamiento de palmeras”.
En este sentido, ha querido reconocer “el gran trabajo que han realizado y realizan los trabajadores del servicio de jardines” a pesar de haber contado en ocasiones con recursos de personal insuficientes; “trabajadores que, una vez puesto en marcha este contrato, permanecerán como personal laboral municipal, lo que nos permitirá también reforzar otros servicios para la mejora de la ciudad a la vez que potenciaremos nuestras zonas verdes, tanto desde el punto de vista paisajístico como medioambiental, para el uso y disfrute de los ciudadanos roqueteros”.
En total serán 1.697.165,16 los metros cuadrados de zona verde sobre los que se han programado las actuaciones de conservación y mantenimiento, en todos los núcleos poblacionales del municipio. Dicha cantidad, a su vez, se ha dividido en dos lotes independientes según la zona geográfica.
El proyecto contempla una inversión de 6.795.270,39 euros anuales, programada por espacio de cuatro años, con posibilidad de prorrogar un año más. Durante este periodo, la empresa o empresas ganadoras de cada lote habrán de desempeñar labores de cuidado, conservación y consolidación en el tiempo de las zonas verdes del municipio, implementando los procesos necesarios para contribuir a la mejora de su estado ecológico y valores botánico y ornamental.
Señalados como zonas verdes, son objeto de este pliego espacios como parques, jardines urbanos, especies de jardinería en las playas, arbolado, jardines, jardineras, maceteros, elementos vegetales y estructuras florales existentes en vías públicas, colegios, escuelas infantiles, instalaciones deportivas, cementerios y dependencias municipales varias, así como ramblas, paseos marítimos, plazas, bulevares, medianas, rotondas y acerados no asfaltados públicos.
Por su parte, la concejala delegada de Aseo urbano, Parques y jardines y Mercados, Susi Ibáñez, ha destacado el importante trabajo desarrollado por los técnicos, tanto de Presidencia como de Contratación y Parques y jardines durante casi dos años de estudio y redacción del pliego.
Se trata de un texto que adapta las funciones de conservación y mantenimiento de las zonas verdes al contexto actual, introduciendo importantes implicaciones sociales y medioambientales. En este sentido, de cara a los procesos de concurso, junto a los capítulos de calidad-precio, historial, solvencia económica y creación de empleo, toman relevancia también criterios relativos al estudio y mejora en cuanto a eficiencia energética, la integración de políticas inclusivas en la organización de los grupos de trabajo, el favorecimiento de la conciliación personal-familiar, la elección de sistemas o estrategias con menor impacto ambiental o la integración de acciones divulgativas y de educación ambiental, “lo que redundará en el refuerzo de valores como sostenibilidad, legado o futuro”
Entran en juego, a este respecto, nuevas visiones y tipologías en cuanto a la integración de valores medioambientales en las estrategias y programas de trabajo: se valorará, por ejemplo, la apertura de modalidades de funcionamiento a criterios de economía circular, la monitorización y reducción en las huellas ambiental e hídrica, la elección de materiales y consumibles no contaminantes, ecológicos, reciclados o reciclables, la limitación de aplicación de productos fitosanitarios, la compra a proveedores locales, el uso de plantas autóctonas y producidas ecológicamente, o la utilización de envases reciclados, compostables, reutilizables, reciclables o biodegradables.
Se prestará asimismo atención preferente a la no utilización de especies exóticas invasoras o con potencial invasor, así como a la sustitución y adecuada eliminación de colonias de este tipo de especies ya implantadas en jardines, la adopción de iniciativas destinadas a favorecer la presencia de aves y a la conservación de la biodiversidad.