Esta escuela de verano ofrece un espacio lúdico a menores con trastorno del espectro autista y, al mismo tiempo, favorece la conciliación familiar
El alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, ha visitado el campamento de verano que la asociación Altea lleva a cabo por quinto año consecutivo durante los meses de julio y agosto.
Se trata de una iniciativa en la que participan un total de 60 usuarios cuyo objetivo es que niños y niñas de distintas edades que padecen trastorno del espectro autista (TEA) puedan disfrutar de un espacio lúdico y disfrutar de un gran número de actividades, al igual que el resto de jóvenes de su edad durante el periodo estival.
El alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, ha destacado la labor que Altea lleva a cabo para mejorar la calidad de vida de estos jóvenes y la de sus familias, en especial, la de los más pequeños para que puedan disfrutar del verano en igual de condiciones que el resto de niños de su edad.
Por su parte, la presidenta de Altea, Mari Carmen Almagro, ha explicado que en este campamento los usuarios pueden convivir, compartir y disfrutar en un ambiente idílico, inclusivo y adaptado, con atención específica a cada participante de la mano de un equipo de profesionales cualificados y de voluntarios.
Además, Almagro ha destacado que se trata de un campamento de referencia y de calidad en el que cada año se produce un notable aumento de la demanda, en concreto, en esta edición se ha superado el 15%. Por otro lado, insiste en la importancia de esta actividad que “va más allá de un espacio de diversión porque ayuda a mantener y desarrollar rutinas y habilidades en periodos vacaciones, favorece la conciliación familiar en periodos no lectivos y fomenta la cohesión social, la convivencia y el respeto a la conciliación familiar”.
“En definitiva, este espacio se convierte en un espacio valioso para la conciliación para las familias que da servicio a cerca de 70 usuarios con TEA y más de 200 familiares”,
Actividades
El campamento de verano de Altea, que se lleva a cabo durante los meses de julio y agosto, contempla el desarrollo diario de un gran número de actividades que pasan por la celebración de la Asamblea para iniciar la mañana y explicar qué se va a hacer a lo largo del día.
También, durante las primeras horas de la mañana se llevan a cabo actividades deportivas practicando cada semana una disciplina diferente adaptándola a las necesidades de cada niño y niña. Los usuarios también disfrutan de juegos al aire libre bajo la supervisión de los monitores, así como, como de actividades de mesa, talleres, piscina y playa.
