El alcalde Gabriel Amat ha calificado de “incierta” la respuesta del Gobierno sobre las causas que han impedido el acuerdo para la construcción de un cuartel de la Guardia Civil de Roquetas de Mar, ya que el valor del suelo no ha sido óbice en ningún momento para llevarlo a cabo.
Esta afirmación queda probada por el hecho de que el 17 de enero de 2001 se firmó un protocolo de intenciones entre el Ayuntamiento y la Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de la Seguridad del Estado del Ministerio del Interior, en el que se recogía la cesión de un solar en Las Salinas, la realización del consiguiente proyecto de construcción y la aportación de 300.000 euros, a cambio de los terrenos del actual cuartel en la Plaza de Luís Martín.
Esto demuestra, según Amat, que en los cálculos del Gobierno nunca ha estado la construcción de un nuevo acuartelamiento para la Guardia Civil, “ya que el Ayuntamiento jamás ha puesto obstáculos para que el municipio disponga de unas nuevas dependencias destinadas al benemérito instituto”, ha dicho.
En parecidos términos se ha expresado con relación a la comisaría de policía que también pretende construirse en el municipio, manifestando que el Ayuntamiento aprobó el 21 de septiembre de 2006 disponer de una parcela de 2.674 metros cuadrados en el sector 18 de Las Salinas para su cesión al Ministerio del Interior, y más tarde el arquitecto Guido Cimadomo, previa supervisión y aprobación por parte del Ministerio del Interior, llevó a cabo la elaboración del proyecto que tuvo un coste de ejecución de 58.460 euros.
El mismo, como es lógico, fue remitido a Madrid y aún no ha habido respuesta oficial por parte del Gobierno sobre la demora que viene sufriendo.
Por todo ello, el alcalde entiende que en este proyecto sólo falta que “el Gobierno cumpla con su palabra y no engañe más a la opinión pública, porque los almerienses en general y los roqueteros en particular no se merecen esta falta de interés hacia ellos”.