Sobresaliente también los actores Armando de Río y Mapi Sagaseta en este comedia que se representó el domingo
Hora y media duró ‘La mentira’ de Carlos Hipólito a su pareja en el escenario Natalia Millán. El público que acudió el domingo a Roqueta de Mar, a su Auditorio para disfrutar de esta comedia no podía imaginar el final del montaje, que sorprende a todos. Nadie podía pensar que Carlos Hipólito que interpreta a Pablo, con una apariencia de bonachón y de no haber roto un plato, pudiera tener escondido hasta la última escena el desenlace de la obra.
A lo largo del desarrollo de la obra, se van sucediendo distintas situaciones, aunque en el trasfondo siempre ronda la mentira. Al final, nadie se cree a nadie y todo parece normal, aunque se den las paradojas que siempre rondan a una pareja. Es una comedia en toda regla donde los actores brillan a un altísimo nivel. El éxito de la obra fue tan claro que la representación de hora y media se hizo corta.
Alicia (Natalia Millán) y Pablo (Carlos Hipólito) han invitado a cenar a la pareja amiga formada por Miguel (Armando del Río) y Laura (Mapi Sagaseta). Pero Alicia ha visto por la calle a Miguel besando a otra mujer e insiste en que si ve a Laura debe contárselo, por lo que le pide a Pablo que cancele la cena.
Sin embargo, Pablo insiste en no cancelar la cena y, sobre todo, que Alicia no le diga nada a Laura. La cena trascurre con Alicia mosqueada. Después del fracaso de la cena, la obra se centra en la pareja formada por Hipólito y Millán. Todo gira en torno a la mentira, tanto es así que Alicia quiere saber si Pablo alguna vez le ha sido infiel. Carlos Hipólito al final se confiesa y asegura que una vez fue infiel, con lo que provocad la ira de Alicia, y esto hace que se eche atrás y asegure que todo es mentira.
Entre mentiras y más mentiras, se va enredando la historia de tal manera, que al final, Pablo se siente fue de sitio cuando su propia esposa le dice que ha tenido una historia con su amigo Miguel (Armando del Río). Pero Pablo no se lo puede creer, con su mejor amigo no puede tener una historia su mujer. Sería algo increíble.
A todo esto el público se lo pasa en grande con unos actores que están inmensos. Cuando la obra para el público está acabada y todo es felicidad, se volvieron a encender las luces en el escenario, y hay una escena a modo de flashback en el que los actores representan un momento de la cena. Es el momento de descubrirse toda la verdad, para sorpresa de todos.
Fueron varios minutos de aplausos, momento que aprovechó Carlos Hipólito para dirigirse al público y dejar bien claro que “es un honor trabajar en este maravilloso Teatro Auditorio de Roquetas de Mar, donde nos tratan siempre muy bien, tanto su director Juan José Martín como todo el personal. De verdad es un placer venir a Roquetas”.