El alcalde Gabriel Amat y las concejalas Eloísa Cabrera y Francisca Ruano oficializaron ayer con su presencia el acabado de las obras de acondicionamiento de la Plaza de la Rocalla, que han tenido un plazo de ejecución de casi dos meses y han cambiado sustancialmente este espacio dotándolo de mejores servicios para los ciudadanos.
Concretamente se ha remodelado el pavimento de los más de 400 metros cuadrados de este espacio y se ha acondicionado el acerado y alumbrado público, además de incluir otras mejoras en la zona de juegos infantiles que ya había instalados.
Como es habitual, el alcalde se ha congratulado por las mejoras urbanísticas que se han llevado a cabo en este barrio, y ha señalado que desde el ayuntamiento se trabaja en este tipo de actuaciones para ofrecer una mejor calidad de vida a los ciudadanos.