Ampliación de Roquetas de Mar
1954. 159 viviendas. Arquitecto: José García-Nieto Gascón
La plaza de colonización es su elemento más destacable. La geometría es rectangular y las alineaciones generan el trazado ortogonal de las calles de la primera fase. Junto a San Agustín y San Francisco (Huércal Overa) son los pueblos que presentan las plazas cerradas, aunque el ejemplo de Roquetas de Mar se acerca más a las tradicionales plazas decimonónicas de España, y destaca una de sus fachadas completamente porticada.
Se mantiene el criterio habitual en muchos pueblos, de situar en uno de los lados más largos de la plaza el edificio social, las artesanías y las viviendas para comerciantes.
Fuente: Instituto de Estudios Almerienses.
El Parador
1954. 56 viviendas. Arquitecto: José García-Nieto Gascón
El pueblo se sitúa en una posición estratégica en el cruce de la Nacional 340 con la carretera hacia Alicún, donde había existido una venta en la que descansaban los carros.
El proyecto muestra una cierta provisionalidad al prever unos espacios con doble funcionalidad inicial y futura. Así en el plano del ayuntamiento y comercio se aprecia que en una primera fase se destina una parte del edificio la vivienda del funcionario del INC, y se convierte en una segunda en despachos municipales. Circunstancias parecidas ocurren en la escuela adaptable a capilla.
La iglesia se construyó entre los años 1965 y 1966, según el proyecto del arquitecto Francisco Langle Granados, hijo de Guillermo Langle Rubio, uno de los más importantes arquitectos almerienses del siglo pasado.
Fuente: Instituto de Estudios Almerienses.
Las Marinas
1958. 62 viviendas. Arquitecto: José Luis Fernández del Amo
José Luis Fernández del Amo fue el arquitecto que realizó los proyectos más interesantes de cuantos trabajaron en el INC. Su capacidad de innovación le llevó a buscar soluciones diferentes en muchos de los aspectos de los pueblos. Aquí, los edificios públicos se disponen en un espacio central donde la iglesia, el centro social y administrativo, la escuela, la vivienda del maestro y las dos artesanías forman un núcleo en el centro del trazado rodeado de zonas ajardinadas.
Es una forma de entender la «plaza del pueblo» de modo muy diferente a las tradicionales plazas porticadas españolas. El porche no recorre longitudinalmente los edificios, como en la ampliación de Roquetas de Mar, sino que se sitúa por completo debajo de la planta alta del ayuntamiento, en un espacio cuadrado, que posteriormente ha sido cerrado.
Fuente: Instituto de Estudios Almerienses.
El Solanillo
1968. 44 viviendas. Arquitecto: Francisco Langle Granados
Es el único pueblo de la provincia de Almeria en cuyo trazado se diseñan calles independientes para vehículos con acceso a las dependencias agrícolas, lo que origina unas fachadas formadas por tapias bajas. Los volúmenes de los graneros y un cierto giro del retranqueo del portón proporcionan un resultado interesante, partiendo de un programa con escaso interés, lo que demuestra el acierto de unos profesionales que supieron sacar partido utilizando elementos muy simples de la arquitectura tradicional con materiales sencillos como el enfoscado y la cal.
También debe resaltarse la construcción para el abastecimiento de agua de un depósito enterrado y otro elevado, como dos elementos independientes, único ejemplo en la provincia.
Fuente: Instituto de Estudios Almerienses.